– Se acabó – me dijiste apoyada en la puerta de la cocina.
Estabas herida pero el dolor no te inquietaba; llena de la serenidad propia de la que lo abandona todo por un tesoro aún mayor.
– Fuerza y valor – te dije. – Creo que todo será para bien.
Y te abracé.
Me parece un mensaje muy bonito y espero que a la persona que se lo hayan dedicado le haya gustado mucho porque la verdad es que es un gran detalle. Pero según pasa el tiempo, vienen los problemas y todo lo que viene, al final se acaba yendo, todo lo que empieza acaba, y todo tiene un fin.
Al final esas marcas que dejas por las calles, como este graffiti, se tienen que borrar para no recordarlo y hacerte daño.
El amor es una experiencia muy bonita pero cuando acaba te deja una herida que tiene que cerrarse bien porque sino puede traer muchos problemas.