Adiós es una palabra prohibida en mi diccionario personal.

Es una palabra a la que odio, a la que detesto.

No afronto la separación, la ruptura… ¡No! ¡No puedo!

El adiós no existe. ¡No quiero que exista!

«Adiós » me dijiste y todo lo bueno que vivía en mi desapareció.