Tenéis que decidiros. Si estáis dispuestos a empezar un camino juntos, tenéis que elegir el calzado adecuado. Pensad que muchas parejas se rompen a medio camino por esta causa…

Ambos debéis llevar zapato cómodo. El tacón no es bueno para grandes distancias. Acaba haciendo daño o rompiéndose en el trayecto. No pongáis pues el acento en lo elegante, en lo glamuroso, en lo chic… Zapato cómodo, que los dos os sintáis a gusto en la travesía. Ya el camino es largo y duro como para tener que afrontarlo con ampollas y rozaduras desde el comienzo.

Y que sea flexible, de buena suela, bien curtido y sin defectos en sus costuras. Lo importante es que dure. Luego, que sea amarillo o rojo, liso o con estampados, moderno o clásico… ya da un poco igual. Ahí cada uno elegid lo que más os guste.

Un camino puede ser apasionante pero hay que saber andarlo.